La impresión digital en la opción preferida en muchas aplicaciones de gran formato, gracias a los avances tecnológicos.
La fiabilidad de las máquinas, sumada a la evolución constante de cabezales y tintas, permitió impresiones uniformes y adaptadas, en tanto los avances en software y los materiales aportaron versatilidad y flexibilidad a todos los segmentos de la industria en los que la revolución digital ha abierto las puertas a los tirajes cortos, los ejemplares sueltos, las versiones y los datos variables.
La impresión por inyección de tinta en gran formato permite plazos de entrega más cortos, entornos de producción mejores, logística más sencilla y flujos de trabajo integrales más eficaces y existen también consideraciones económicas, como la reducción de inventario.
Este cambio hizo que las impresoras de uno a cinco metros de ancho hayan pasado de ser máquinas especiales a ser equipos de uso normal y los pedidos de los clientes son más diversos.
Así, los impresores sirven al mercado convencional y entraron en nuevos nichos de mercado y segmentos especiales en los que la tecnología digital puede producir trabajos novedosos y la demanda de impresoras por inyección de tinta en gran formato continúa aumentando en todo el espectro digital, ya que las empresas quieren producir con mayor calidad, velocidad y fiabilidad.
La versatilidad es una de las ventajas clave de la inyección de tinta, y la diversificación suele ser el factor principal para ampliar los márgenes de beneficio. Cada minuto de una máquina sin producir merma la rentabilidad de la empresa, de ahí que los equipos modernos tengan en cuenta estos aspectos en lo relativo a la funcionalidad y el rendimiento.
En el segmento del gran formato, el crecimiento depende de numerosos factores: la tecnología de los equipos y su fiabilidad, los costos, la diversificación en materia de aplicaciones y el equilibrio entre el volumen y la versatilidad de producir tiradas cortas y ejemplares sueltos.
Aun así, la flexibilidad está demostrando ser un factor clave en las inversiones futuras: una misma impresora puede producir los volúmenes adecuados en un abanico amplio de materiales y aplicaciones.
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