Las alternativas respetuosas con el medio ambiente no son nuevas, aunque se observa un cambio de tendencia en la utilización de materiales reutilizables.
Más allá de las suposiciones, lejos de desaparecer el papel parece haber tomado nuevo envión, gracias a alternativas como el reciclado o el sintético entre otros, que buscan ser una alternativa más ecológica, sobre todo al tener en cuenta que cada ser humano llega a consumir unos 100 árboles a lo largo de su vida para los distintos productos de papel que necesita, lo que se multiplica en los países más desarrollados.
El uso de papeles reciclados se extiende día a día y se fabrican con fibras provenientes de otros papeles usados, entre 10 y 100% de su composición, por lo que existen varias categorías, como Quest: reciclado al 100% de fibra post consumo; Evergreen: papel al 50% reciclado de fibra virgen y el otro 50% dividido entre un 20% fibra pre consumo y el 30% restante de fibra post consumo.
Pero además, está el “papel sintético”, que sería una película plástica opaca o transparente donde se puede escribir o imprimir, con la apariencia del papel tradicional con algunas diferencias como una mayor resistencia al uso.
La mayor ventaja que proporciona la utilización de papel sintético es el uso de casi cualquier plástico para su producción. Es posible utilizar casi cualquier elemento plástico para su fabricación, desde botellas de PET, recipientes plásticos, bolsas de supermercados.
Este material es utilizado en sectores como el de envases, productos gráficos y el etiquetaje, pudiendo ser utilizados por varias tecnologías de impresión como offset, flexo e impresión digital, entre otras.
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