Las tintas requieren cierto tipo de consideraciones a la hora de su uso y su conservación, para garantizar la calidad del trabajo.
Para evitar inconvenientes deberá considerarse el empleo de la tinta, su vida útil, preparación de colores.
Cada tipo de trabajo y producto en la impresión requiere de una tinta particular, por lo que varias de ellas pueden aplicar para diferentes sustratos, entonces, la selección dependerá de qué uso tendrá el producto.
Tener en consideración el destino del impreso es importante para que una empresa gráfica con clientes de rubros variados vea las necesidades de ellos para elegir entre las distintas tintas la que mejor se adapte al uso final, para evitar equívocos.
Tener en cuenta el destino final para elegir la tinta ayuda en la industria gráfica en la que se complica solucionar inconvenientes cuando algo está mal impreso y esos errores pueden significar el desperdicio de material.
Para evitar inconvenientes deberá considerarse el empleo de la tinta, su vida útil, los retornos de máquinas, preparación de colores y controles en la impresión, como viscosidad, adherencia, y resistencia a la luz. Además se deberán corregir y prevenir problemas como el retinte.
En la preparación de los colores especiales que requiera cada cliente, se podrá apelar a guardar muestras para comparación en trabajos posteriores. Esas probetas deberán cambiarse periódicamente para evitar la decoloración.
En este sentido, en todos los casos el almacenamiento deberá hacerse en recipientes cerrados sin contactos con el aire ni exposición a la luz solar. Finalmente, para reducir costos y mantener liberado el depósito, se debe apuntar a reutilizar los sobrantes en nuevas mezclas.
