La magia de las luces de neón es una tendencia vintage muy atractiva, sobre todo luego del pasaje de neón tradicional a LED.
A mediados de la década de 1980 volvieron a la palestra en cartelerías de cine, barras de bares y vidrieras.
Los carteles de tubos de luz de neón tienen una reminiscencia de los primeros años del siglo XX, pero se han reinventado, y su uso en tiendas comerciales genera atención, motivación e ingresos al local para concretar la compra.
En la década de 1920 comenzaron a utilizarse en letreros de cabarets, casinos y restaurantes, pero cuatro décadas más tarde su uso tuvo una retracción y pasó a identificar locales de menor atractivo.
Pero a mediados de la década de 1980 volvieron a la palestra en cartelerías de cine, barras de bares y vidrieras y, así llegó los carteles exteriores o como elementos decorativos interiores.
El neón pasó a ser un estilo de iluminación más minimalista, ya que se ha considerado un producto eléctrico de consumo muy alto y con considerable impacto ambiental, lo que se revisó con la aparición del neón LED o falso neón, como lo llaman algunos.
Su uso creció debido a su bajo costo y fácil maniobrabilidad, ya que se usa plástico y no vidrio, es más duradero y no hacen falta experimentados artesanos para aplicarlo. Además, su aspecto más cálido permite diseñar elementos y carteles más versátiles y diurnos.
Neón y LED
Las tradicionales luces de neón son tubos de vidrio con gas neón o argón, mercurio y otros minerales en su interior que, al ser estimulados con electricidad producen luces de colores. Su diseño artesanal permite lograr formas personalizadas que no difíciles de duplicar y con una luz brillante. Sin embargo, los colores son limitados y los cristales son frágiles. Para crearlos, hacen falta artesanos con muchos años de experiencia.
Por su parte, el LED es una fuente de luz puntiforme y, gracias a los reguladores, se obtienen colores variables. Es fácil trabajar ya que el material es flexible y no se suele romper. Se puede realizar cualquier forma que desee el cliente y la vida útil es muy extensa con bajo consumo de energía. Son más caros y menos atractivos.
