DE LA CALLE AL LOCAL

La instalación de graffitis dentro de los comercios es una tendencia que además de generar una imagen especial, representa un ahorro en publicidad.

 

La atracción de los graffiti es mayor que la decoración estándar, por lo que se utiliza como herramienta de marketing y ventas.


Entrar los graffitis callejeros al interior de los locales, para decorar un espacio, transmitir los valores de una marca o diferenciarse de la competencia de una manera creativa es una tendencia que en alza.
Gracias a la existencia de empresas especializadas en este tipo de graffiti profesional, los artistas con experiencia en la pintura callejera pueden dar un giro decorativo a los comercios.
Esta es una forma de decoración diferente y llamativa que, además, da a las empresas una imagen identificable y moderna. Cada diseño es único y alejado de las decoraciones estándar. Es un trabajo hecho a medida.
Además, la atracción de los graffiti es mayor que la decoración estándar, por lo que se utiliza como herramienta de marketing y ventas, que da una identidad única y crear un ambiente muy atractivo para un público más joven.
Otra de las ventajas es que los diseños que realizan reflejan la personalidad de la marca, su historia e incluso sus productos o servicios. La capacidad de comunicar de una forma visual es enorme cuando se opta por los graffitis a la hora de decorar una empresa.

 

A estos beneficios también hay que sumar el económico, dado que son menos caros que la publicidad tradicional y, al tratarse de una inversión que se hace una única vez y se mantiene en el tiempo, sin depender del gasto original.
Si bien es cierto que los graffiti pueden adaptarse a prácticamente cualquier negocio, hay una serie de empresas donde es más popular, como bares y restaurantes, las tiendas de moda y las firmas relacionadas con la industria de la música y el arte.
En tanto, hay marcas fusionando su identidad con el arte urbano, creando auténticas obras de arte que perduran en la memoria de los consumidores y atraen un mayor número de público a comprar sus productos.
El uso de graffitis profesionales ayuda a los negocios a mejorar la estética de sus locales, creando una identidad visual y corporativa y propicia el envío de mensajes publicitarios que perduran en la mente de sus clientes de forma económica.