Para sobrevivir, los museos avanzan en la interacción, colecciones digitales y exposiciones virtuales. El arte superó el espacio físico y se mueve hacia el mundo virtual. Esta tendencia estaría relegada a los interiores del museo si no se hubiera dado el crecimiento de la tecnología de la pantalla digital que permite exhibir, transformar y multiplicar imágenes en cualquier calidad y cualquier número. Al comenzar el nuevo siglo, el arte salió de las paredes del museo a las calles. Los festivales probaron que las pantallas de LEDs pueden ser utilizadas no sólo para hacer publicidad, sino para promover la cultura y el arte y la tecnología ayudó a transformar paredes o edificios enteros en mega-pantallas. El arte urbano incluyó tradicionalmente carteles y grafitis, pero hoy está creciendo con las proyecciones de imágenes en pantallas DOOH, LCD y LED. Así, el progreso multimedia y la tecnología cambian la infraestructura del arte moderno, de su logística y de la economía en una escala global. Una ciudad moderna avanza hacia un ambiente de comunicación, además de un lugar habitable. La ciudad moderna no puede evitar las tensiones y el caos de un entorno empresarial dinámico pero puede transformar espacios urbanos en algo más habitable, menos agotador, más estético y colorido con la ayuda de exposiciones digitales al aire libre: como fueron las exposiciones de arte del Metro digital de Ámsterdam y de Rotterdam para el Rijksmuseum o el despliegue del Bicentenario en Buenos Aires. Arte en las Pantallas auspiciado por Cyberarts de Boston y el centro de convención de Massachusetts, ofrece una multipantalla LED, para que cada día más de cien mil peatones puedan ver arte y contenido comercial e informativo en las cercanías del MCCA. En marzo pasado, cinco grandes museos estadounidenses acordaron colaborar con la Asociación de la publicidad exterior de América (OAAA) en conducir una celebración de la herencia artística de ese país. A partir del 4 de agosto lugares, como Times Square, Sunset Boulevard y Route, serán transformados en galerías al aire libre libre, junto con otros 50.000 lugares de exhibición, incluyendo vallas publicitarias de LED, plataformas y trenes del subterráneo, micros y paradas de autobús, y atracciones geográficas. En menor escala, el grupo Pattison Onestop organiza arte en tránsito en su red de pantallas digitales en centros comerciales de Canadá. Entre mayo y junio últimos instaló un proyecto de collages de imágenes contemporáneas e históricas. En Gran Bretaña campañas similares realizó el grupo Ocean Outdoor, con pantallas LEDs en las que el público puede participar en festivales interactivos. Estas ideas para promover arte y cultura son apoyadas por los operadores de redes digitales. El arte en las pantallas es una nueva tendencia, por la cual las pantallas digitales no sólo son vias de publicidad e información, sino que se transforman en herramientas útiles que satisfacen las necesidades emocionales e intelectuales del público.