Nuevas técnicas y tecnologías pueden reemplazar a otras más antañas. Sin embargo, hay ciertas soluciones que perduran en el tiempo.
La industria busca constantemente innovaciones cada vez más nuevas, pero no siempre es necesario encontrar nuevas soluciones para reemplazar las antiguas. Es poco probable que la tampografía pierda su popularidad como forma de decorar una superficie. Esto se debe a su flexibilidad sin precedentes: la capacidad de decorar cualquier superficie de cualquier manera, a un costo óptimo, extremadamente rápido y con alta precisión.
Según Visión Digital, los sistemas de funcionamiento, existen dos tipos de máquinas de tampografía. Los dos principios de trabajo utilizados en estas máquinas son el Sistema abierto: el sistema abierto y el sistema cerrado.
En el abierto, la copa de tinta no está sellada y la mayoría de la capa externa de la placa de impresión se utiliza. La fuente de tinta abierta lleva a la imagen en la placa y el exceso de tinta se elimina con una cuchilla. Los disolventes de la tinta se evaporan y la tinta se seca al aire. Las modificaciones de color en el sistema abierto son mucho más fáciles que en un sistema cerrado.
En el sistema cerrado, el tintero está cerrado y tiene un borde afilado que se usa para limpiar el exceso de tinta de la imagen. Hay una exposición limitada de la tinta al aire que cambia su espesor. Esto ayuda a los operadores a gestionar el proceso de impresión más fácilmente que un sistema cerrado.
Algunas de las principales aplicaciones de la tampografía incluyen electrodomésticos, dispositivos médicos, artículos deportivos, juguetes como Hot wheels, legos, muñecos, carros, sonajeros, chupetes, biberones, etc., rotulación de identificación, grandes electrodomésticos, accesorios y piezas de automóviles y prendas de vestir.