El digital signage puede ser una buena opción para integrar la comunidad de la salud y bajar la ansiedad en las zonas de espera.
El contenido de la pantalla puede dar consejos, pero también indicaciones para los usuarios.
La ansiedad en las salas de espera de sanatorios y clínicas ha sido una constante histórica que se incrementó durante la pandemia, por los temores a los contagios y el estrés generado por cualquier persona que llegase a toser dentro de ese ámbito común de los establecimientos de salud.
Una de las formas de bajar esos grados de tensión que, por sí solos, generan malestares en la salud del paciente, es la instalación de pantallas en las que se difundan datos del tiempo, noticias, entretenimientos, recomendaciones para el cuidado de la salud y datos sobre el movimiento en el establecimiento, además de avisos de productos y servicios.
En este sentido, el contenido del digital signage puede dar consejos, pero también indicaciones para que los usuarios sepan de manera más fácil cómo llegar a su destino dentro de la institución y manejar los diferentes autoservicios y trámites, tanto como la información de los sucesos más recurrentes en la clínica.
Así, integrar un listado con un directorio de servicios, con un plano con la ubicación de cada uno de ellos reduce la ansiedad y la necesidad de información de los pacientes, al tiempo que quita presión al equipo de trabajo que, al no tener que proveer esta información ante consultas reiteradas, puede centrarse en los servicios personalizados. Además, reducirá el contacto entre personal y pacientes, disminuyendo riesgos de contagios.
Estas aplicaciones se podrán sumar a la gestión de filas y turnos, reduciendo la percepción de los largos tiempos de espera. En cuanto a la comunidad de la salud, estas pantallas podrán hacer público el cumplimiento de objetivos, las nuevas designaciones, los reconocimientos académicos, los logros profesionales y otros sucesos como cumpleaños y nacimientos.
Estas informaciones lograrán integrar a pacientes con trabajadores y será más fácil llamar a la donación de sangre, la participación de otros eventos públicos y hasta la asistencia a talleres y cursos que amplíen los conocimientos y faciliten la gestión, facilitando la vida de todos los lados de la institución.
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