Pese a los presagios de que lo digital reemplazará al impreso, la demanda por papel crece, principalmente en mercados emergentes.
Hace unos 2.000 años, los chinos utilizaron por primera vez el papel para envolver objetos preciosos, pero al poco tiempo se dieron cuenta, de que era un soporte mucho más liviano que el bambú y más barato que la seda, por lo que empezaron a escribir sobre él.
Según una nota de la BBC, aunque se fabricaba y usaba en la época de los califatos en Medio Oriente, África y la Península Ibérica, donde la población estaba alfabetizada, fue poco antes de la invención de la imprenta en Alemania, que el papel comenzó a ser utilizado ampliamente en Occidente.
Antes de que Johannes Gutenberg inventase la imprenta de tipos móviles, en 1455, los cristianos acostumbraban usar el pergamino para escribir, que era un soporte caro, ya que estaba hecho en base al cuero del animal, y cuando los comerciantes necesitaron llevar las cuentas y hacer contratos, el papel llegó en su auxilio.
Por siglos el amonio presente en la orina fue utilizado por las papeleras para pulverizar la pulpa del algodón y fabricar el papel. “Una vez que la mezcla estaba macerada, la celulosa del algodón se desprendía y flotaba en una suerte de sopa espesa que luego era vertida y dejada para secar”, dice la BBC.
Con los años, el proceso se fue modernizando: se inventaron máquinas trilladoras, blanqueadores, aditivos para hacer papel más rápido y barato. Todo ello llevó a que el precio del papel fuera cada vez más económico. Sin embargo, la demanda creció tanto, que Europa y Estados Unidos comenzaron a quedarse sin algodón y a mitad del siglo XIX, la madera se volvió la mayor fuente de producción.
En la actualidad, la demanda por papel sigue creciendo, particularmente de la mano de países emergentes, como China. Según la consultora Pöyry Management Consulting, la demanda por papel y cartón crecerá en 482 millones de toneladas hacia 2030, lo que equivale a un aumento de 1,1% al año.
Sin embargo, esto dependerá del segmento: mientras el papel para periódicos enfrenta una menor demanda, el papel tisú y los cartones van en aumento.
“Desde 1950, la producción de papel ha crecido continuamente. Pero los últimos cinco o seis años han sido muy difíciles para la industria global, en particular en los mercados occidentales”, dijo Tino Suhonen, analista de Pöyry Management en el reporte.
31 de mayo de 2018 – ep